La comunicación accesible es necesaria para garantizar que todas las personas, independientemente de sus habilidades, puedan recibir y transmitir información de manera efectiva. La falta de comunicación accesible puede excluir a las personas con discapacidades de una variedad de situaciones y oportunidades, incluyendo el acceso a la educación, el empleo, los servicios públicos, la atención médica y la participación en la vida pública.
Algunas personas tienen dificultades para recibir información debido a discapacidades visuales o auditivas. Por ejemplo, las personas con discapacidad visual pueden tener dificultades para acceder a información en formato impreso, mientras que las personas con discapacidad auditiva pueden tener dificultades para seguir conversaciones o presentaciones orales. La falta de acceso a la información puede limitar las oportunidades de estas personas y dificultar su integración en la sociedad.
Por otro lado, algunas personas tienen dificultades para transmitir información debido a discapacidades del habla o del lenguaje. Estas personas pueden tener dificultades para comunicarse efectivamente en situaciones sociales o profesionales, lo que puede limitar su capacidad para establecer relaciones y participar plenamente en la vida pública.
En resumen, la comunicación accesible es necesaria para garantizar que todas las personas puedan recibir y transmitir información de manera efectiva. La falta de comunicación accesible puede excluir a las personas con discapacidades de oportunidades importantes y limitar su capacidad para participar plenamente en la sociedad.